Diario del Mar

"Me llamo Katherine Greenwood Wells, tengo dieciocho años. Nací en una cuna hecha de olas, mecida por el vaivén del maravilloso océano. El mar corre por mis venas. Mi madre se llamaba Anne Wells, y falleció cuando yo había cumplido seis años. Mi padre, Alfonso Greenwood, me enseñó todo lo que sé sobre el mar, pero por desgracia, desapareció hace dos años, sin dejar rastro. Y desde entonces, no he dejado de buscarle."




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miércoles, 3 de octubre de 2012

DDM: Capítulo 39

Hola a todos!
Simplemente deciros que este capítulo me ha costado algo escribirlo... Tampoco me odiéis en cuanto lo terminéis, ¿vale?

Y que una amiga ha creado un blog, que trata de LJDH, vamos, es un fan-fic. Me encantaría que os pasarías y os leyerais los capítulos que lleva, a mí me encanta ^^

                                                       Mi Pequeño Sinsajo

Espero que os guste, y espero que me dejéis vuestras opiniones. Besos!






Harry observó la puerta de piedra, intentando averiguar qué hacer. Colocó una mano sobre la fría piedra, acariciando un relieve, y de pronto, sonó un click, como si se hubiera activado un mecanismo, por lo que la puerta comenzó a ocultarse tras la pared. Nos alejamos todos a la vez, observando la pesada piedra moviéndose.

Jake se pegó aún más a mí, en un ademán de protección, un gesto que me pareció muy tierno.
Harry tragó saliva, y segundos después de haberse abierto completamente la puerta, entró en la cavidad.
Seguidamente, entré yo, junto a Jake, con extrema curiosidad.

Me sorprendí por lo que vi; se trataba de una sala redonda, más bien una cavidad, con un círculo no muy grande en el techo, que iluminaba tenuemente un rectángulo en el suelo. Allí dentro no había oro. Allí dentro no había ningún tesoro, ni joyas. Ni siquiera una espada, o un arma antigua. Nada.

- ¿Qué es esto? - inquirió Elizabeth, temblando levemente de frío.

- ¿Estás seguro de que hemos llegado? -susurré, mirando a Harry.

Él se limitó a asentir, observando la sala, recorriendo la piedra con su mirada, hasta posarla en el centro de la misma.

Yo hice lo mismo, y al fijarme más, pude ver que había palabras escritas en las paredes. Entrecerré los ojos, frunciendo el ceño, y me acerqué a una de las frases, seguida de Jacob.
Poco a poco, las palabras cobraron sentido, formando nombres. Nombres de personas.

Los primeros parecían más antiguos, ya que estaban medio borrados. No reconocía ninguno, salvo apellidos sueltos, los cuales tenía yo también.

Llilly, John, Christine, Adele, Josh...

Ninguno de ellos me sonaba, hasta llegar a uno concreto. Uno que me dejó sin habla.

"Anne Wells".

Boqueé intentando coger aire, mientras se me humedecían los ojos.

- Kathy, ¿ese no es el nombre de tu madre? -preguntó Jacob.

Yo me limité a asentir con lentitud, mordiéndome la lengua. Me giré con brusquedad, mirando a los demás.

- Qué hace el nombre de mi madre aquí. -susurré.

Gwendolyn se mordió el labio, y Harry me miró con tristeza. Algo pasaba, algo me ocultaban, y me temía que no era nada bueno.

- Kathy, ahora... ahora no hay tiempo para explicaciones. -contestó Harry.

Le tembló la voz, y me preocupó. Harry casi nunca lloraba, ¿por qué ahora iba a hacerlo?

Gwendolyn se acercó a mí, y me tomó de la mano, mientras murmuró un suave "Tranquila".
Jacob, cojeando, me quitó el brazo de encima, y se apoyó sobre la pared, para no molestarme.

- Qué... qué ocurre... -susurré.

Harry me dirigió una mirada cargada de tristeza y de ternura, y seguidamente, caminó hacia Jake. Yo me quedé paralizada, observando su gesto triste y decaído, observando lo que serían los últimos segundos de paz en mi vida:

- Jake... -susurró, con la voz quebrada. -Ojalá me perdones. Lo siento tanto... -bajó la mirada, con los ojos bañados en lágrimas. -Pero es lo que debo hacer. Sé que no entiendes nada, pero poco a poco lo harás. -otra pausa, que me pareció eterna. -No hay tesoro que valga, Jake. Esta isla guarda una energía terrible, es la que mantiene el equilibrio entre el bien y el mal, la paz y la guerra. Pero cada un determinado número de años, la cueva necesita... un sacrificio. Un sacrificio que devuelva la energía a la isla.

Nos quedamos en silencio, nadie dijo nada, y me fijé en que Diana lloraba en silencio, con una auténtica expresión de dolor. Un dolor que me aceleró el corazón.

Jacob estaba con la boca entreabierta, mirándole a Harry.

- ¿Y...? -consiguió murmurar.

Harry le dirigió una mirada cargada de tristeza, y entonces, siguió hablando.

- Hemos pasado mucho tiempo juntos, Jake, y te aprecio demasiado. Echaré de menos las aventuras que vivíamos, pero sé que esto es por una buena causa.

Jacob negó con la cabeza, sin entender nada. Entonces, Harry le abrazó con fuerza, mientras cerraba los ojos.
Después del abrazo, me miró fijamente.

- Kathy, Kathy, Kathy... -susurró. -Mi pequeña Kathy.

Parpadeé varias veces, con ganas de llorar, aunque sin saber muy bien de qué iba todo.

- Harry, ¿por qué haces esto? -conseguí preguntar, sin que me temblara la voz.

Él sacudió la cabeza, y sin decir nada, me envolvió en sus brazos con fuerza.
Noté que le temblaba la voz cuando dijo:

- Kathy, sabes que te quiero mucho. Mucho.

- Claro. -contesté en un susurro.

- Jamás lo olvides. Eres parte de mi vida, tienes un trozo de mi corazón, y espero tener yo parte del tuyo.

- Lo tienes, Harry. -dije con un hilo de voz.

- Tantos recuerdos junto a ti... Mi Kat, la pequeña osita.

Se apartó de mí, pero sin quitarme las manos de los brazos.

- Puede que este sea nuestro último momento juntos, físicamente. Pero siempre estaré a tu lado, aunque tú no lo creas.

Las lágrimas salían de sus ojos sin él poder evitarlo, al igual que yo. "La pequeña osita".

- Harry, de qué hablas...

Me tembló el labio inferior por el miedo y la tristeza. ¿Qué pasaba?

- Kathy, jamás me olvides.

Y dicho esto, volvió a abrazarme. Algo me dijo que le devolviera el abrazo, y así lo hice. Aspiré su aroma, sin saber que esa sería la última vez que le tendría entre mis brazos.

Se separó de mí sin mirarme, tal vez porque no podría aguantarlo, y se acercó a Diana, a la que besó con pasión.

- Di, te quiero con toda mi alma. -le susurró.- No lo olvides. Cuidaré de ti y del pequeño, sea como sea, te lo prometo.

Diana se echó a llorar sobre su hombros, y supe que eso le dolió en lo más profundo.

- Tienes que ser fuerte.

- No puedo... -sollozó ella. -No te vayas, por favor, Harry, no lo hagas.

Y sé que eso le partió el corazón. Se limitó a abrazarla, mientras cerraba los ojos, y susurró:

- Te amo, Diana. Jamás cambiará eso.

Y después de sus palabras, se apartó de ella. Diana cayó al suelo de rodillas, y observó al amor de su vida caminar hacia el centro de la sala.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, cuando fui consciente de que lo que era aquello; era una despedida. Harry se estaba despidiendo de todos nosotros.

- ¡No! -exclamé, fuera de mí, sin poder creer lo que veía. -¡Harry, no!

Y justo cuando me disponía a correr hacia él, las manos de Gwendolyn me frenaron. Me arrastró hacia atrás, aunque yo pataleé y me resistí, gritando su nombre.

- ¡¡Harry, escúchame!! ¡No!

Gwendolyn me agarró con fuerza, impidiéndome que fuera tras él.

Jacob estaba serio, aunque por dentro parecía roto, con la mirada perdida.

Harry giró la cabeza por última vez, observando al lejano Jacob, y musitó:

- Te eligieron a ti, Jake, porque eras el mayor. El más adecuado para ser el Príncipe de los Mares. Pero eso no quita para que mi sangre no sea aceptada por esta isla.

Y después de eso, nos miró con extrema tristeza, y se tumbó sobre el centro del rectángulo, mirando hacia arriba. De pronto, un haz de luz iluminó su cuerpo.
Observé sus facciones perfectas, sus ojos marrones brillando por culpa de las lágrimas, sus labios contraídos por el dolor. Observé a Harry, mi mejor amigo, alejarse de mí.

- ¡¡Harry!!

Desistí, ya que sabía que Gwendolyn no me iba a soltar, y medio caí al suelo con las rodillas, sin fuerzas para pensar. Me limité a observar, impotente, a Harry.

Aquello no podía estar pasando, no, no, no.

De pronto, algo parecido a las lianas, emergió del suelo, justo alrededor del cuerpo de Harry, y lo envolvieron. Él comenzó a gritar de dolor, y entonces todo ocurrió demasiado rápido y confuso.
No pude soportar aquello, oírle gritar, no pude soportar estar delante de él, y verle morir. No pude soportar verle sufrir esa manera.

Y entonces me puse a gritar su nombre, a rogarle que volviera.

- ¡¡Suéltame!! -chillé, entre lágrimas. -¡¡Suéltame, está sufriendo!!

Y verle pasar por eso, me rompía el corazón. Me hacía sentir su agonía.

Pero me sentía impotente, me sentía una hormiga en medio de un huracán; yo gritando su nombre, el nombre de el chico que agonizaba en aquella sala, mientras lloraba e intentaba levantarme para salvarle.

Sabía que se iba, pero no podía hacer nada. Gwendolyn era muy fuerte, y me impedía correr hacia Harry, que agonizaba por el dolor.

- ¡Harry! ¡¡NO TE VAYAS!! -chillé con todas mis fuerzas.

Hasta que de pronto, aquellos gritos pararon. Me quedé inmóvil, sollozando, cuando supe que había sido demasiado tarde. Las lianas desaparecían, junto con el cuerpo inerte de Harry. Mi querido Harry...
En aquel momento, esas cosas arrastraban el cuerpo de uno de los mayores apoyos en mi vida hacia las profundidades de la Tierra.

Gwendolyn me soltó, y entonces corrí hacia el rectángulo del centro de la sala, creyendo que aún podía hacer algo.

Grité, y golpeé el suelo de piedra, hasta que me sangraron los nudillos, hasta que mi piel se destrozó, hasta que mis llantos se apagaron.

Y ahí en el suelo, inmóvil, con las manos ensangrentadas, y el corazón roto, ajena al exterior, sentí cómo mi mundo se derrumbaba del todo. Cómo ya no quedaba nada de él, de lo que había construido desde que nací. Los pilares de mi vida habían sido destruidos, debilitando la estructura cada vez más, hasta que ya no quedaba nada de ella. Absolutamente nada.

Mi corazón latía con demasiada fuerza, tanta, que me dolía. Notaba el pulso en mis oídos, sonando cada vez más alto, como intentando apagar las voces que me llamaban desde fuera.

La realidad era más cortante que una espada. Más fría que el agua del océano helado, más dolorosa que la tortura.
Y era mi realidad. La realidad de mi vida.

Y entonces, exploté.

- ¡¡¡NOOO!!! -rugí, llorando más alto que nunca.

Golpeé el suelo con los puños, haciéndome aún más daño. Pero no me importaba. Ese dolor no era nada comparado con el que sentía por dentro, en mi corazón.

Era gracioso, pensar en que mi vida era casi perfecta, y darme cuenta de todo lo que ha cambiado desde entonces. Gracioso y triste.

Es como si fuera un castigo. ¿Un castigo por qué? ¿Qué había hecho mal? Qué pregunta más estúpida... Muchas cosas.

- Harry, no... -sollocé. -No me dejes... No lo hagas...

Como si no lo hubiera hecho ya. 

Era tarde para todo. Ahora sólo podía lamentarme, por no haber sido más fuerte, por no haberle salvado, por no haberme ofrecido como sacrificio yo, por no haberle agradecido lo que había hecho por mí, por no haberle hecho saber lo que él significaba para mí. 

Tantos años junto a él, tantos años siendo amigos inseparables, para nada. Tantos recuerdos, que acababan en un borrón de dolor. Que ya no servían de nada. Ya no, ahora que él no estaba para revivirlos a mi lado. 

"Te quiero tanto, Harry... ¿Por qué te has ido? ¿Por qué me has hecho esto? ¿Por qué te alejas de mí? ¿Por qué me abandonas?"

Tantas preguntas, que seguirían sin respuesta hasta el fin de mis días. 

Y así, rota y perdida, derrumbada y herida, hundida y deprimida, grité. Grité su nombre con todas mis fuerzas, lo grité hasta que me dolió la garganta, hasta que me dolieron los oídos, hasta que me dolió el alma. 
Grité su nombre hasta que las ganas de llorar me consumieron, dejándome tirada sobre el suelo, entre convulsiones y sollozos. 

Oí ruidos lejanos, de los demás, y entonces, noté unas manos sobre mi espalda. Era un contacto frío y lejano, ajeno a mí. 

Parecía estar gritando, hasta que su voz se hizo clara y nítida. 

- Kathy. Kathy, ven aquí. 

No abrí los ojos, no quería hacerlo. Me quedé encogida sobre mí misma, en el suelo, llorando débilmente.  

- Ven aquí. -repitió.

No sabía quién hablaba, tampoco quería hacerlo. No quería enfrentarme a la realidad, no quería ser consciente del todo de que Harry se había ido. 

Entonces, unos brazos me incorporaron del suelo, y me apretaron contra un cuerpo cálido. Yo pataleé, solloce aún más fuerte, y pegué a quien me había cogido, para librarme. 

Me acarició el pelo con suavidad y cariño, mientras yo desistía, aunque no del todo; seguí pegando puñetazos en su pecho. 

- Sssh, Kathy, tranquila. 

Y reconocí la voz de Jake, lo que me hizo llorar aún más. 
Agarré su camisa medio rota con fuerza, mientras me apoyaba en su pecho y lloraba con intensidad. 
Lloré por Harry, por la parte de mi vida que se había llevado tan de repente, por mí. Por todo mi dolor. 

Maldije mi vida hasta que me quedé sin fuerza alguna.

Y de tanto llorar, gritar, y odiar mi maldita vida, me quedé medio dormida. 

Noté muy levemente que alguien me levantaba del suelo, aunque costosamente. Y después de eso, no sentí nada más.
Tan sólo oscuridad, y mi propio dolor. 









11 comentarios:

  1. TE MATO TE MATO TE MATO TE MATO!!!!!
    Eress la peor persona que conozcoo! Has matado a Harry!!
    ¿Y sabes lo peor? Que me has echo llorar, ojalá pudieras ver como he llorado en silencio mientras leía, y me duele la gargaanta!!
    Todo por tú culpa!!
    No sé como lo consigues pero SIEMPRE siento todo lo que escribes!
    Te diría que serás una gran escritora, pero es que ya lo eres!
    Muchos Besoss April, y ahora a ver si consigo leer algo que me quite las lágrimas! ;)

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    1. Lo sé, soy una mala persona T_T Jajajaja Era lo que tenía pensado desde el principio de esta historia, pero a medida que iba pasando, le he ido cogiendo más y más cariño, y me ha costado hacerlo... No sabes cómo me alegran tus comentarios, en serio, me encanta que me digas que lo sientes.. Porque es lo que intento jajajaj
      En cuanto pueda, me pongo al día con el Juego de mi Vida ^^
      Espero que el siguiente te haga más feliz jajaja
      Besoooos Criskti!

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    2. Eres genial April!!
      En El Juego de mi Vida está disponible para tí siempre que quieras!
      PD: ¿Has pensado en publicar tu historia en papel? Sería un gran libro!
      Besoss

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    3. Oins, tú más, en serio *-*
      No quiero que pase más tiempo, quiero ponerme al día ya! ^^
      Bueno, no este libro, pero sí otro que tengo :3
      Un besazo enorme!!

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  2. Yo ya sabes que te odio por hacer esto a Harry,aunque en el fondo te quiero #FraseSinSentido HARRY,VUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEELVEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE,I <3 U! Kathy,mona,ESPABILA,ESPABILA,QUE ERES TONTACA HIJA!
    APRIL,Yo creo que si no te digo que ESCRIBES GENIAL DIGAS LO QUE DIGAS Y QUE NO DEJES DE ESCRIBIR,reviento.Por mucho que me puedas decir que yo escribo mejor que tú,es mentira,tú escribes mejor cielo.Y tengo ganas de que alguna editorial lea este maravilloso blog y te lance a la fama para poder tener una gran AMIGA Y GRAN ESCRITORA. Te quiero mucho cielo,ya lo sabes. <3 P.D: HARRY VUELVEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE

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    1. Kathy es tonta, tonta perdía, ya lo sabes. A mí me encantaría :') Sabes que escribes maravillosamente bien, y no me harás cambiar de opinión ;)
      Te quiero muchísimo! ^^ Y lo siento, pero Harry no volverá xD

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  3. Madre mía, te adoro enserio que perfección de capítulo... No puede serlo más. Creo que he sentido hasta angustía por la pobre Kathy.......... PERO PORQUE HAS HECHO ESTO???????? JAJAJAJA ERES MALA, MUCHO. Pero la forma en que lo has descrito me ha fascinado. Uf si tu dices que escribes mal... yo me vuelvo a aprender a primaria vale?? jejejejee enserio... PEFECTION!
    Besitos :)

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    1. *____* Que me sonrojo viniendo de alguien tan buena como tú! Soy malísima, lo sé, no me peguéis T_T
      Awww, me alegra saber que te ha gustado ^^
      Un besazo, y gracias por todo! :)

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    2. jo que tonti no digas eso que eres buenísima :))

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  4. Ostras. Ostras. Ostras ostras... Me voy, resucitas a Jake y matas a Harry. Que pasa, que no se puede morir la pelizabet esa? Nada, que no la matas, parece como si te gustara o algo. Que tiene que morir alguien, nada tocamos a los que le gustan a Queen A, pero a pelizabet nada de nada... Pues vale vale...
    PD: NOOOO HARRY!!!!!! TE AMO!!!! NO DEJES A DIANA Y NO ME DEJES A MI!!!! AAAHHHH!!!!
    PD2: molas!:)

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  5. Mader mia ! te voy a matar, seguiré leyendo pero tenía que decirtelo, como Harry no vuelva a aparecer te mata ! Creas un personaje tan perfecto y lo matas ?! QUE SE QUE LO QUE HIZO ESTUVO MAL PERO ¿¡MATARLE!? Tengo que seguir leyendo, un saludo :)

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